Término municipal: Sant Josep. Fincas o caminos cercanos: Can Codolar. Acceso: Los restos se pueden ver desde el camino, pero hay que estar atentos a la vegetación que pueden tapar o cubrir los restos. Tipo de yacimiento: Posibles estructuras dolménicas. Interés: Son los únicos restos megalíticos que se conocen en Ibiza. Proyección: Probablemente esta todo excavado pero hay una evidente dejación por parte de la administración de su conservación
Los restos de Can Sergent corresponden a dos sepulcros megalíticos muy destruidos. Son los únicos monumentos de este tipo que se conocen en Ibiza. El que conserva una mayor estructura el denominado sepulcro I, con un fragmento de corredor y una pared curvada adosada. El sepulcro II consiste apenas en dos hileras de losas, que parecen ser los restos de otro corredor.
Este yacimiento, que fue excavado en 1.978, es el único de época prehistórica en el que existen evidencias funerarias. Se encuentra situado al sur de la isla de Ibiza, en la parte baja de la ladera del Puig Palleu, en un área desde la que domina el Pla de Santa Jordi y las Salinas de Ibiza. El estado de conservación de los restos es bastante deficiente, sólo se conserva una pequeña parte de las estructuras, ya que éstas han sido desmontadas en parte por los payeses de la zona para la construcción de muros.
Can Sergent I. Está formado por dos filas de losas calcáreas paralelas, cinco piedras en la fila este y cuatro en la oeste. Tiene una longitud conservada de unos 2 metros, y ha sido interpretado como el corredor que conduce a una cámara circular, de la que sólo se conservaría parte de una fila de losas en la zona noroeste. En el interior del corredor aparecieron fragmentos cerámicos de pasta poco depurada, un pequeño puñal de bronce de forma triangular de pequeñas dimensiones, 5,4 cm. de longitud y 2 cm. de ancho, con dos remaches en su extremo y por último, agrupaciones de huesos humanos.
Can Sergent II. S encuentra situado a unos 15 metros hacia el este del anterior. Sólo se conservan dos filas de losas paralelas con medio metro de separación, que estaban rellenas de piedras y tierra. En su momento se interpretó como los restos de otro supuesto corredor, del que la cámara habría desaparecido, pero actualmente parece claro que tan solo se trata de un muro, como los que podemos encontrar en otros yacimientos prehistóricos.
Los materiales hallados apuntan a que el yacimiento sería contemporáneo de los inicios del mundo talayótico en Mallorca y Menorca, aunque un puñalito hallado podría ser perfectamente megalítico, dado que su tipología ha sido datada entre el 1.800 y el 1.400 a.C. Se disponen, por otra parte, de dos dataciones radiocarbónicas calibradas, a partir de muestras de los huesos huma nos hallados en el exterior de la estructura pétrea, con fechas de 889-799 y el 779-519 a.C., las cuales, evidentemente, no corresponden tampoco al megalitismo y quizás sea a una reutilización de la estructura.