El yacimiento de Son Matge quedó destruido en un 75 % tras el derrumbe del abrigo |
En la anterior entrada comente sobre aquellos yacimientos o monumentos de la prehistoria que ya no podremos ver. En esta ocasión haré mención de aquellos monumentos que si bien han estado amenazados han conseguido seguir en pie aunque en ocasiones el precio pagado ha sido muy alto. Esta es la relación:
Son Matge. Este importante yacimiento, uno de los fundamentales de la arqueología mallorquina, al conservar una completa secuencia estratigráfica desde los primeros poblamientos hasta los tiempos romanos quedo prácticamente destruido en febrero de 2.005 después de que una avalancha de toneladas de piedra, provocada, al parecer, por el efecto de las lluvias y el frío, lo arrasara y sepultara. Aún así es todavía visitable lo poco que se ha conservado y el enclave paisajístico donde se encuentra permite hacerse una idea de como debía ser la vida de los primeros moradores de la isla.
Son Real. Hasta los años ochenta del pasado siglo la necrópolis vecina del Illot des Porros estuvo expuesta al deterioro y al vandalismo por la ausencia total de protección y vigilancia, llegando incluso a practicarse motocross entre las tumbas. Su integración dentro de la finca pública de Son Real ha permitido un mejor control sobre el resurgimiento del yacimiento con nuevas excavaciones periódicas.
La necrópolis del Illot des Porros quedo destruida casi en su totalidad después de un temporal en el año 2.003 |
Illot des Porros. En el invierno de 2.003, la necrópolis postalayótica ubicada en el Illot des Porros fue destruida, casi en su totalidad, por el oleaje de un temporal virulento. El abandono absoluto al que está sometido el patrimonio histórico antiguo en las Islas Baleares está degenerando en una rápida destrucción. No basta con desenterrar e investigar, también hay que preservar los nuevos hallazgos.
Bocchoris. La que fue la única población nativa de Mallorca que se federó con Roma subsiste en el más total de los olvidos. El yacimiento situado cerca de Cala Bóquer esta totalmente expuesto al vandalismo, la presión humana y vencida por una burocracia insufrible. La basura se extiende por la zona, la maleza se ha comido la mayoría de las estructuras. Urge una delimitación correcta del yacimiento, como mínimo una buena limpieza y su correspondiente señalización.
Restos de la muralla de Cas Quitxero encajonada entre construcciones recientes. Urge un desbroce del terreno. |
Cas Quitxero. El descubrimiento del resto de un muralla talayótica cercano a Palma mientras se estaba realizando una limpieza del terreno para una futura construcción de adosados estuvo rodeado de polémica. Finalmente se ha podido preservar, encajonado entre construcciones recientes. Es lógico pensar que en la zona y debajo de muchas construcciones hay todavía muchos restos y vestigios que consciente o inconscientemente han quedado enterradas.
Ets Antigors. En este yacimiento de Ses Salines se encontraban las ruinas del santuario, llamado «habitación romana» por Colominas y que fueron cubiertas de nuevo tras las excavaciones por condición expresada en el momento de las excavaciones por el dueño en aquel entonces de los terrenos ¿Quizás esta decisión ayudo a preservar el monumento aunque no sea visible? Otro elemento desaparecido, este de forma definitiva, fueron unas cámaras hipogeas al pie de un talayot, que se destruyeron en el momento de las excavaciones para utilizar su piedra en el trazado del tren de Santanyí.
Excepto por el caso de Son Matge los otros casos se deben a la acción directa o indirecta del hombre: quizás el efecto de «desenterrar y abandonar» sea la causa más habitual del deterioro de los yacimientos. Se ha destruido más en los últimos ciento veinte años que en los dos mil anteriores.