Aparte de los grandes poblados talayóticos, mayoritariamente conocidos y visitados, Menorca cuenta con pequeños yacimientos arqueológicos, mayoritariamente de difícil acceso porque se encuentran en medio de propiedades privadas y generalmente poco conocidos por falta de investigación o porque esta se llevo a cabo ya hace bastante tiempo.
Algunos de estos poblados ya eran pequeños en la prehistoria y otros han sufrido un proceso de destrucción que los ha reducido a la mínima expresión. Esto último es el caso de Binicalsitx, donde podemos apreciar un talayot de dimensiones considerables.
Al norte del talayot, podremos ver los restos del recinto de taula de Binimassó y detrás del mismo, entre una espesa vegetación, lo poco que queda de un talayot construido sobre una cueva. Tanto los talayots como la taula formarían parte de un mismo poblado. El resto de casas que los acompañarían han desaparecido completamente.